Estructura de la Nueva Selectividad:
Fase General. Se compone de cuatro exámenes obligatorios: Lengua, Historia o Filosofía, Lengua Extranjera y una asignatura específica de Bachillerato de la modalidad de Bachillerato cursada por el alumno.
Fase Específica. Pensada para subir la nota de la fase general. Es de carácter voluntario y se pueden realizar desde uno a cuatro exámenes de asignaturas específicas de Bachillerato. Las dos notas más altas si se han superado más de dos exámenes, siempre que se haya obtenido una calificación superior a cinco, se ponderarán según la afinidad que tengan con la carrera que se desea estudiar y se sumarán a la calificación obtenida en la fase general.
La nota final de Selectividad oscilará entre 0 y 14 puntos como máximo. Se podrán obtener hasta 10 puntos en la fase general y subir nota hasta 14 puntos como máximo con la fase específica.
Para los alumnos de años anteriores que hayan aprobado en convocatorias pasadas, la nota de Selectividad antigua se considerará igual que la de la nueva fase general, es decir, hasta un máximo de 10 puntos. Por lo tanto si se desea subir esa nota, no se tendrán que repetir todas las pruebas sino realizar solo la parte específica. Si se suspende la parte específica en ningún caso contaría negativamente sino que se mantendría la nota de la fase General.
Todo esto hace prever un aumento en las notas de corte. Por ello resultará muy importante realizar la parte específica para alcanzar el máximo de nota posible, y de esta forma poder acceder a los estudios deseados.